Hace aproximadamente 15 años que llegó a nuestras vidas y, aunque al principio pocos pensaban que fuera algo más que una moda, ha demostrado que es un género imprescindible para entender el panorama musical actual. Guste más o menos, el reggaetón llena las pistas de clubs tanto nuevos como históricos, como la Oak Barcelona, además de copar las listas de éxitos en todo el mundo, conquistando ya incluso el mercado anglosajón. Pero el presente ya lo conocemos todos sobradamente. Lo que queremos descubrir hoy desde BN Grup son los orígenes de uno de los estilos musicales que más relevancia han cobrado en las últimas décadas.
Como su nombre indica, el género debe mucho al reggae jamaicano, a pesar de que hoy las similitudes no sean tan perceptibles a primera escucha. Pero hay un elemento clave que es la síncopa, la acentuación contraintuitiva del ritmo que se hace especialmente patente en la potente percusión electrónica del reggaetón. Este probablemente sea su rasgo más distintivo, pero para llegar hasta ahí habría que seguir una evolución paulatina que parte del reggae en español que se hacía en Panamá y Puerto Rico en los años 80.
A medida que se introdujeron elementos de rap y del propio dancehall, el género electrónico jamaicano más popular, el reggaetón fue tomando forma como estilo urbano y underground. Aunque Panamá desarrolló también una escena temprana, fue Puerto Rico donde el naciente género cobró una fuerza mayor e incluso levantó polémica en la sociedad por lo explícito de sus letras y sus bailes, a medida que la popularidad de la música trascendía a las barreras de los barrios humildes.
En 1998 es cuando se da el salto de un estilo fabricado a base de grabaciones caseras a un creciente interés discográfico, y es así como a comienzos de la década de 2000 podemos hablar ya de una escena consolidada que pronto estaría lista para dar el salto internacional. Artistas puertorriqueños como Daddy Yankee y Don Omar, así como otros más eclécticos como Calle 13, Tego Calderón o Ivy Queen, eran parte de esa generación que abrió los oídos del mundo a un ritmo irresistible, si bien hay que apuntar que en España fue una panameña la primera en alcanzar el éxito con un single de reggaetón: Lorna y su ‘Papi Chulo’, en 2003.